Paso 1: Haga una paleta improvisada
Ahora no estoy pintor profesional, pero de vez en cuando me gusta coger un pincel e intentar (sin éxito) para convertirse en el próximo Picasso. Ya no tengo una paleta real, durante estas explosiones al azar de motivación tiendo a usar un pedazo de cartón en su lugar y, créeme que funciona muy bien!