Paso 3: Sírvete una taza de café.
Asegúrese de que es agradable y caliente. Obtener un sabor que te gusta; te lo mereces. Ver el vapor que repliega y se desplaza perezosamente en el aire de la mañana, una sutil sombra de brisa de verano. Sentir el calor de la taza penetrar más y más profundo en tus manos, calienta el resto de su cuerpo. No creo. Solo foco.