¿Usted nunca trapeó el techo de la cocina? ¿No?
Yo tampoco. Hasta que limpié la nevera de un día...
Las cosas empezaron inocente lo suficiente. Incluso había un momento "Mantener mi cerveza y ver esto!". No hay Redbull cualquiera.
No, aparte el aderezo ranch (o fue caducado leche...) que se había convertido en un bio-peligro y debían ser eliminados de este fue un día aburrido en la vida normal y había tareas que hacer.
Mi trabajo consistía en limpiar la nevera. Para empezar todo lo de la nevera tiré. Luego que limpiar los estantes. El siguiente fue a ordenar a través de las cosas y deshacerse de los artículos vencidos. ¿Sabías que la penicilina podía crecer en salsa de tomate? No lo hice.
Después de tirar canastas en la basura puede con los elementos caducados que encontré con una botella de cristal llena de sedimento marrón. Era sobras de cerveza vieja levadura. Pensé que no era una buena idea lanzar una botella de cristal completo y ponerlo en su lugar en el fregadero.
A continuación pongo todo lo que no fue vencido en la nevera. Luego que limpiar los contadores donde se habían sentado las cosas de la nevera. Ahora llegó el momento de vaciar la botella de vidrio para poder reciclarlo.
Cogí el abrebotellas y cebada sólo tocó la tapa de la botella cuando
BOOM!
El contenido de la botella se evacuó todo el techo de la cocina. Y mi cara.
Me quedé allí aturdido tratando de averiguar por qué personas estaban riendo.
Después de unos segundos me di cuenta de lo que había sucedido. Y después de unos segundos más también se dio cuenta de que ahora me gustaría conseguir la oportunidad de limpiar el resto de la cocina. Incluyendo el techo.
Esta experiencia me enseñó una lección muy importante en la vida - sobornar a alguien para limpiar el refrigerador próxima vez!