Cuando era pequeña, estaba totalmente entralled con el libro "Perfecto el cerdo", la historia de un dulce cerdito que le concedió su deseo de volar. ¿Y qué mejor que un cerdo volando? Un festivo flying pig por supuesto! :)
Diseñé este pequeño individuo sin un patrón, y su cola es rizada usando un viejo truco que me enseñó mi mamá: mojado su fragmento de hilo, enróllelo alrededor de un gancho de crochet de alluminum, luego hornear en horno precalentado a 350 durante 5 minutos y volia!--usted consigue un trozo de hilo sacacorchos animoso.