Paso 6: Recuerdos de Fond(ue)
Después de ver caravanas de Reagan y de Gorbachev zoom por camino a las conversaciones de paz y asistiendo a la cena de casa de mis padres con intérprete de Raisa lancé mi propia fiesta de la fondue "rojo". Pan rojo, teñido de la fondue y el vino blanco con colorante rojo (vino rojo habría sido impensable) y estúpidamente, ilumina la habitación con luces rojas que destruye el efecto del alimento teñido. De todos modos todo lo que sólo parecía gris pero divertido. Oscuridad fuera de noche, todos con cubierta en nuestro paraphanelia comunista recorrían las calles vacías, agitando una bandera roja y cantar la internacional en la parte superior de los pulmones. No consigue arrestados pero conseguimos algunos parece asustado.
Un recuerdo melancólico de la fondue es gracias de mi novia de secundaria visitar durante mi primer año en la Universidad de Providence, Rhode Island. Desde que no tuvimos ningún equipo especial amontonaron alrededor de la estufa eléctrica en el dormitorio abandonado en un intento (fallido) para recrear el buen ánimo de fondue. Sólo me hizo aún más nostalgia.
Años más tarde, un bote de esmalte compatible con fondue de Zabar se convirtió en un tácito compromiso presente: fue la primera compra que hice en común con el hombre casó más adelante. A pesar de sus raíces de Tennessee compartía mi entusiasmo por el queso derretido, que era un punto de venta definido. Propuse a él en el metro camino a casa de un restaurante suizo en el East village. No pretendo proponer en el metro--que quería hacerlo de fondue, pero de alguna manera el queso no me dio bastante coraje. Sólo he podido revelar fuera la pregunta como el tren de N tirada lejos de pasillo de ciudad.
Una última Advertencia sobre fondue: siempre me da sueños extraños. No mal, apenas vivos e inquietantes. Sueños de cine arte del euro.