Procesamiento de manteca de cerdo no requiere ninguna habilidad, el proceso es muy fácil y se ha hecho tradicionalmente.
Manteca de cerdo procesado conserva la grasa mediante la eliminación de impurezas y exceso de agua. Es perecederos y puede conservarse a temperatura ambiente o en la nevera.
Una manteca de cerdo adecuadamente procesada es casi inodoro y sin sabor. Es blanco y cremoso en color.