Paso 2: Conformación de lámina
Usé un pedazo sobrante de acero encontrado en el trabajo, pero no saben nada sobre la composición o la dureza del acero. Lo elegí porque ya tenía dos agujeros para la fijación de la manija y no quiero molestar con la perforación.
Investigué diseños en línea y formas de hoja y dibujó una pareja en mi pieza de acero con un marcador permanente (borrado con etanol) antes de que yo estaba contento con lo que tenía.
Entonces la forma general de la hoja de corte con una sierra y había refinado con los archivos de mi gran gran abuelo, que aún tienen un grano agradable independientemente de su edad.
Luego había adelgazado la hoja en la amoladora de banco. Este paso es probablemente el más delicado de todo el proceso como un ángulo ligeramente apagado puede arruinar todo el trabajo que hiciste en la hoja. Tienen una jarra de agua cerca a la inmersión en el cuchillo cada par de segundos de molienda: si se sobrecalienta, 1) usted no será capaz de sostener la hoja y puede quemarse y 2) corre el riesgo de oxidar el acero (el color cambia a azul, empieza echando humo y no podrás afilar la hoja). Ser muy cuidadoso en la punta de la hoja y sus partes delgadas como aquellas se recalienta con facilidad. Como regla general, cuanto más fino el metal obtiene más a menudo se necesita alternar entre pulido y enfriamiento en agua.
Colocar el filo hacia arriba, así que puede estar la parte posterior de la cuchilla en el soporte del metal como aprieta. Intentar moler uniformemente y un poco a la vez, cambiar el lado que está pulido por lo que el borde ocurre en el medio.
No te preocupes afilado la cuchilla ahora, será mucho más fácil de manejar y menos frágiles.