Motores de corriente continua se puede hacer que gire hacia la derecha o hacia la izquierda cambiando la polaridad de la tensión aplicada a sus terminales. El esfuerzo de torsión que se genera en el eje de salida se puede ampliar o reducido mediante el uso de un tren de engranajes. En la mayoría de los motores, como se muestra a continuación, el tren de engranajes escala hasta el par del motor mediante el uso de una reducción de engranajes salidas un par mucho mayor (aunque sea a costa de un muy reducido salida RPM).
El problema con motores de corriente continua es que cuando tiene un voltaje aplicado a sus terminales, tienden a girar para siempre en una dirección determinada, detener o revertir el motor sólo puede lograrse por corte de suministro eléctrico o por inversión de polaridad. En un Motor de la C.C., control de velocidad se logra variando el voltaje de la terminal pero control de la posición del eje es muy difícil de aplicar.
Motores servos por otra parte, nos permiten controlar la posición (o ángulo) del eje de salida del motor. Esto puede ser muy útil cuando queremos mover una superficie de control como un timón o una hélice en una posición particular.