Paso 1: Jengibre: el sanador!
(1) En primer lugar, ponga algún jengibre en agua caliente.
(2) Ahora, a sacar el jengibre.
(3) Poner el agua en una bandeja de hielo y guardar en el congelador y deje que se congele.
(4) Triturar los cubitos de hielo y a aspirar las virutas jengibre congeladas.