Paso 1: Hacer la base
Verter la sosa en la cacerola y poner a fuego bajo. Revolver hasta que las burbujas han sido liberadas. Agregar la granadina, jugo de limón y miel (o azúcar), revuelva hasta que totalmente se combina.
Retire del fuego y poner en la nevera hasta que esté lo suficientemente frío como para congelar.
Realmente, eso es todo. Es tan simple!