Paso 6: mampostería
-lechada de cemento
-recipiente para mezclar la lechada
-algo con
-agua
-espátula o raspador
-esponja con poros pequeños
-pequeñas herramientas de trabajo como copitos de algodón
Coloque algunos lechada seca en el recipiente de mezcla.
Pequeños lotes son mejores que dejarlo en seco y derroche. Recordar... un poco va una l ong forma. No es necesario medir sin embargo usted debe seguir las recomendaciones del fabricante para que la lechada que tenga más lechadas. .Agregar agua un poco a la vez para no añadir demasiado. Mezclar después de cada adición. La lechada debe tener apariencia gruesa pasta y no se debe ejecutar.
Deje que la lechada a soporte. Otra vez seguir las indicaciones del fabricante para tiempo.
Raspador de uso para empujar la lechada en los boquetes. Atención al área difícil como en el techo y la parte inferior de las piezas de azulejo, por lo que no se pierde ningún espacio.
Una vez que la lechada en completo, empezar a eliminar el exceso del rejunte. Comenzará a secar. Se desmenuzará como su desguace apagado. Vaya lentamente y limpie con la mano a menudo para ver los resultados. Usted debe dejar la mayor parte de las baldosas de lechada. Usted puede encontrar que dejarlo en un ligero ángulo sobre un azulejo de la torcida le dará un acabado más liso.
Después de haber eliminado el exceso de raspar a un lado toda la lechada desmenuzada y el polvo por lo que no se vuelve al fango si se moja.
Con un esponja húmeda limpia para limpiar su azulejo suavemente para eliminar la lechada. No insertar el disco duro o eliminas a mucho lechada.
Enjuague la esponja a menudo. Limpie sólo hasta que el azulejo se ve limpio. Más no se, demasiado húmeda la lechada puede romper cuando se secan!
Como el cemento comienza a secarse notarás una neblina en su azulejo. Dejarlo solo. Deje que la lechada se seque un mínimo de 2 horas antes de dar su pajarera un final Limpie con una esponja limpia.
Colgar la pajarera se seque durante un mínimo de 24-48 horas. antes de pasar al siguiente paso.
Polaco de la loseta a devolverle su lustre