La esposa del granjero me introdujo a estos fáciles tortugas hace mucho tiempo. Que me traen recuerdos de la partida en todo el país con la intención de compartir una golosina casera con mi anfitrión, pero en cambio encontrarme en el cuadro, reorganizar con cuidado para que no se notarían. Milla a milla, tortuga después de tortuga. Fue un largo viaje... pero, oh tan dulce!
Chocolate, frutos secos y caramelo-¿qué más puede LinuxMom pedir en un caramelo?