Tenían abrigos para todo tipo de condiciones climáticas.
Manos estaban por todas partes.
Pregunté a su marido si él pondría para arriba algunos ganchos por lo cual no tendríamos tantas capas saturan la casa.
Un día que tuve mandados a ejecutar cuando estaba fuera del trabajo y cuando había vuelto esa noche colgaba del perchero.
Llevó a cabo todas las manos que poseían!
¡ Fue fabuloso!
Me dijo que miró a ganchos que tenían para la venta y decidieron hacer su propio.
Hizo 10 ganchos de herraduras (que tenían de sus caballos) y montado en un tablero y clavado a una viga en la pared.